Vallecito se transforma: Obras históricas en el paraje Difunta Correa

El administrador Mauricio Camacho detalló las mejoras en servicios básicos, infraestructura turística y proyectos de salud, seguridad y educación que cambiarán la vida del pueblo y la experiencia de los visitantes.

El paraje Difunta Correa y el pueblo de Vallecito atraviesan una transformación profunda que busca modernizar la zona más visitada de San Juan. Mauricio Camacho, administrador del paraje, explicó que se trata de un plan integral impulsado por el gobernador Marcelo Orrego, que apunta no solo a mejorar el turismo religioso sino también la calidad de vida de los vecinos.

Agua potable y conectividad: derechos básicos garantizados

El primer paso fue asegurar un servicio elemental: agua potable en cada domicilio de Vallecito. Hasta este año, las 101 familias dependían de una cisterna obsoleta y carecían de conexiones domiciliarias. Desde marzo, cada hogar abre su grifo y cuenta con agua segura.
Otro avance clave fue la instalación de Wi-Fi gratuito en el paraje y en puntos estratégicos del pueblo —escuela, centro de salud, restaurantes y barrios—, gracias a San Juan Innova. De esta manera, tanto los turistas como los habitantes tienen acceso a conectividad sin costo.

Baños nuevos, asadores y estacionamientos

Uno de los reclamos históricos de los visitantes eran los sanitarios. “De cuatro núcleos, solo uno funcionaba”, recordó Camacho. Hoy, tres fueron remodelados a nuevo y se sumó un cuarto en la zona posterior del paraje, alcanzando una capacidad total de 140 plazas entre hombres y mujeres, incluyendo los baños del parador de camiones.
Además, se avanza en la construcción de nuevos asadores, mesas y sectores de recreación, así como en la ampliación del estacionamiento, que tendrá lugar para 202 vehículos, de los cuales 50 serán semicubiertos. El primer estacionamiento quedará reservado para personas con discapacidad.

Obras que trascienden el turismo

El plan integral no se limita al paraje. En paralelo, están en marcha proyectos que impactarán directamente en la comunidad:

• Centro de Salud Vallecito (CAPS): de 1.000 m², en etapa de adjudicación, con plazo de 360 días.

• Unidad Rural de la Policía de San Juan: con corrales para animales sueltos, también con plazo de un año.

• Ampliación de la escuela y el jardín: nuevas aulas para nivel secundario e inicial, además de juegos y espacios cubiertos.

“Trabajamos en tres ejes fundamentales: salud, seguridad y educación”, subrayó Camacho.

Un escenario propio y fiestas nuevas

Otro anuncio destacado fue la construcción de un escenario permanente en el paraje, con capacidad para eventos masivos. El objetivo es que esté listo en marzo, para la próxima Cabalgata de la Fe, evitando el alquiler anual de estructuras.
Además, permitirá incorporar nuevas celebraciones: la Fiesta del Camionero (en marzo) y la Fiesta del Promesante (en noviembre), con la idea de diversificar la agenda cultural y atraer más visitantes.

Cambios en la loma y el hotel remodelado

En la zona superior del paraje, conocida como “la loma”, se realizaron mejoras en el mirador y se proyecta ampliar el espacio donde se encuentra la imagen de la Difunta Correa, para agilizar la circulación en fechas de gran concurrencia como Semana Santa o la Cabalgata.
También se renovó el hotel del paraje, que hoy recibe a más turistas con sectores ampliados y remodelados.

Una “pequeña ciudad de fe”

“Quien visite la Difunta Correa después de dos o tres años va a notar un cambio brutal”, aseguró Camacho. El administrador sostuvo que el plan busca transformar el paraje en una “pequeña ciudad”, moderna y equipada, sin perder su esencia religiosa y cultural.

Con baños renovados, agua potable, conectividad, obras en marcha y una agenda de fiestas que crece, Vallecito se prepara para recibir a los peregrinos y turistas con una infraestructura acorde a su importancia como principal destino turístico de San Juan.